Treinta y Una

El pasado domingo el Real Madrid ganaba su trigésimo primera liga después de remontar en Pamplona un partido que se le había puesto muy complicado tras la expulsión de Cannavaro. Tras la posterior fiesta en Cibeles (y en la discoteca Buddha) tocaba jugar contra el eterno rival. El miércoles, el Barça fue una caricatura de sí mismo y con Buddha y todo el Madrid le coló 4... y porque no quiso meterle 7. Semana grande para el madridismo: título y humillación al Barça en el Bernabéu.

La liga que está a punto de terminar ha sido muy extraña. Equipos grandes implicados en el descenso, la Champions más "barata" de los últimos años, Racing y Almería luchando por la UEFA...Estamos viviendo un periodo de recesión futbolística a nivel español que se ha visto traducido en los resultados de las competciones europeas. Sí, ya se que el Barcelona llegó a seminifales de la Copa de Europa; pero es que para ellos, la Champions empezó precisamente en esa ronda.

Tengo muchas cosas que criticar del Madrid, pero como al final han ganado la Liga, tendremos que empezar por el Barça. La expresión "fin de ciclo" es la más acertada para resumir su situación. Rijkaard ha cumplido perfectamente su labor con títulos y muy buen juego, pero las circunstancias han terminado por superarle. Los fichajes no han dado la talla (Zambrotta, Henry, Abidal...). Se libran Milito y Touré y no han sido, ni mucho menos, determinantes. Las lesiones de Messi, Eto´o y Deco tampoco han ayudado; pero el caso Ronaldinho ha terminado por destrozar un vestuario en el que todos se pensaban mejor que el que tenían al lado. Capítulo aparte merece la labor de Laporta. Más interesado en mostrarse como un catalanista contrario a la opresión del Estado español que en resolver los problemas de su propio club. El tema Ronaldinho ha sido un bomba de relojería que Laporta pasó a Rijkaard pero que con su explosión ha terminado por salpicar a toda la entidad. La reflexión debe ser profunda y la limpia abundante. Sobrán, como mínimo, 7. Veremos si Guardiola tiene la capacidad suficiente para crear un equipo alrededor de Messi competitivo y sicológicamente fuerte que sea capaz de hacer frente al Madrid y a los grandes equipos de Europa.

El Real Madrid, por su parte, ha conseguido un título que mitad se ha merecido, mitad se ha encontrado. Ha sido el mejor, de eso no hay duda, pero es que los demás han sido muy malos. Barcelona, Valencia, Sevilla y At. Madrid han estado muy por debajo de sus posibilidades y al final el Villarreal ha cosechado un segundo puesto merecido, pero ni mucho menos esperado. ¿Qué quiero decir con esto? Que el Madrid no puede cometer el error de antaño de creerse ya invencible. Llevan dos ligas consecutivas, pero más años llevan haciendo el ridículo en Europa. Como muy bien dice mi amigo Jorge (un culé de los de antes) ¿Cuántos años lleva el Madrid sin pasar de octavos en la Champions? Se despidió a Capello porque se juagaba mal. Schuster ha tenido los mismos resultados que el italiano (con el equipo ya hecho) y no ha jugado mucho mejor. Se necesitan un delantero centro y un lateral izquierdo de garantías; además de apuntalar algún puesto más. Así se podrá intentar por fin el asalto a la Décima.

Para terminar, y que no todo sea negativo ya que estamos en semana blanca, destacar 4 nombres: El archicriticado Pepe: vaya central. Lo mejor desde Alkorta y Hierro. Robben: Gran final de temporada; el año que viene sin tanta lesión, será titular indiscutible. Higuaín: ¡por fin le hemos encontrado sitio! en la banda, llegando desde atrás, vaya golazo al Barça; ahora va a ser hasta bueno. Gago: Parece que se ha asentado. Desde la marcha de Redondo y la posterior espantada de Makelele no habíamos tenido tanto criterio y orden en el centro de campo. Perfecto para llevar la manija.


Si Calderón y Mijatovic no se duermen, este Madrid puede hacer cosas muy importantes. Habrá que trabajar y renovarse, pero la primera piedra para que la próxima vez que Raúl suba a la Cibeles sea con la Décima, está más que puesta.