El Gran Error de la Transición

Hoy es el último día de un año que nos deja acontecimientos políticos de una inmensa importancia tanto a nivel nacional como internacional. Han pasado muchas cosas pero para nosotros las más importantes, es evidente, son la reelección de Zapatero en España y el cambio en la Casa Blanca con la elección del neo-salvador Barack Obama. Como no podría ser de otra forma, este año prolijo en noticias, termina con dos acontecimientos realmente censurables como son el atentado terrorista de ETA de esta misma mañana y el conflicto entre Israel y los terroristas de Hamas que deja ya centenaras de muertos en estos días de Navidad.

Al margen de esto, nuestro país también se encuentra inmerso en otro tema polémico como es la financiación de las Comunidades Autónomas. Zapatero ha estado reuniéndose estos días pasados con varios presidentes autonómicos, dejando, porque no decirlo contentos a todos ellos, muy al estilo zapateriano; pero cuando ahora el Ministro de Economía concreta por escrito tan buenas palabras, ya no es todo tan bonito. Esto también es muy del estilo de este desgobierno socialista. No soy en absoluto experto en economía así que no me detendré a analizar detalles, entre otras cosas porque todavía no se conocen y parece que el tema va para largo; pero sí que voy a hacer una breve reflexión sobre el sentido y significado de lo que hoy en día son o pretenden ser las Comunidades Autónomas.

Al morir Franco y emprender el camino hacia la Democracia, muchas fueron las personas que trabajaron para que esto fuera posible y muy loables fueron las concesiones que se hicieron de uno y otro lado con el fin de cerrar heridas pasadas y emprender juntos un camino de libertad y estabilidad. A mí entender aquellos años fueron realmente positivos: monarquía parlamentaria, Constitución, libertades....sólo pongo un pero: la necesidad de la división del territorio nacional en 17 Comunidades Autónomas en aquella época (realidades nacionales en ésta, según parece ser) que muy poco o nada, han aportado de beneficio a España, sino que más bien, están llevándola a un desgaste progresivo que puede terminar, si no en la desmembración del país, sí en acentuar las desigualdades existentes.

¿Era necesario crear "Cataluña" para seguir manteniendo el catalán?¿Era necesario crear el "País Vasco" para que el euskera perdurara? No, definitivamente no. En una nación digna de tal nombre, en la que la lengua oficial es la segunda más hablada en el mundo y donde además cohabitan otras lenguas en algunas partes del territorio, es suficiente con dar libertad para que en cada hogar se utilice el idioma que se quiera y así jamás desaparecerá. Éste es un posible argumento que pueden dar aquellos pro-Comunidades/realidades-nacionales; pero él solo se viene abajo desde el momento en que hay regiones como Cataluña, Galicia o Baleares donde una determinada lengua intenta imponerse sobre la oficial obligando a los niños a estudiar en la primera y sancionando a mayores si emplean la segunda.

La división del territorio español ha supuesto además que, impulsados por ese supuesto aire progresista o secesionista, muchos partidos nacionalistas apoltronados en el poder a base de chantajes a débiles gobiernos nacionales, hayan establecido un sistema de educación basado en el odio a Madrid y a lo que España representa. Concretamente en el País Vasco, la supervivencia de ETA y los nuevos simpatizantes que cada día se adhieren, no tienen otra cantera que la educación recibida en algunas escuelas del País Vasco donde se inculcan que España es el estado opresor que no concede a los vascos sus ansias de libertad. No estoy diciendo que el PNV sea el responsable de la existencia de ETA, pero si se les hubiera apartado del poder hace algunos años en favor del PSOE de Redondo Terreros o Rosa Díez (que habría formado coalición con el PP de Iturgaiz o María San Gil), la situación actual probablemente sería bien distinta.

Al margen de odios, separatismos o creación de reinos de Taifas, las CCAA han multiplicado por 17 el gasto público en funcionariado y burocracia. Hemos tenido que soportar en estos últimos días como Carod Rovira despilfarra el dinero de todos los españoles inaugurando embajadas de Cataluña por el mundo o como el presidente de su Parlamento, y miembro de su mismo partido republicano comunista Ernesto Benach, ha "tuneado" su coche oficial con unos arreglillos por valor de 110.000 €. Por no hablar del presidente la Junta de Galicia, Pérez Touriño que, si en los últimos días no ha aumentado, va ya por su 4º coche oficial. Pero que nadie se lleve a engaño, la culpa no es de Benach por querer un coche nuevo, la culpa es de quien se lo da. Desde que gobierna el señor Zapatero las competencias transferidas a las CCAA no dejan de aumentar. Educación, Sanidad, Vivienda, Inmigración, Lucha contra la Violencia de Género, Obra pública...cuanto más autogobierno, más dinero necesitan y más crecen las desigualdades entre comunidades. Como Zapatero siga así dejará de ser presidente, pero no porque le gane Rajoy, que eso nunca pasará, sino porque no habrá nada que "presidenciar". Se aprueban estatutos, que además de inconstitucionales, no se pueden cumplir y una vez más, todos con la soga al cuello.

En tiempos como los actuales en los que se cuestiona la idoneidad de la Constitución, de la Iglesia, de la Monarquía y hasta del sistema capitalista, me permito yo también cuestionar la idoneidad de los Reinos de Taifas del S. XXI, que para eso los padres de nuestra Democracia, me dieron la oportunidad. Yo ya estoy hecho a la idea de que las Comunidades Autónomas no desaparecerán nunca, lo que pido, al menos, es que los dirigentes catalanes, vascos, gallegos, canarios o andaluces se hagan también a la idea de que ellos no son más que yo por el hecho de que viva en Castilla y León y, sobre todo, que antes que todos esos gentilicios, todos pertenecemos y formamos parte de una gran nación: España. Feliz año 2009 a todos.